Ha vuelto Hilario Pino. Él afirma que regresa con las ganas y la ilusión de siempre, y con el compromiso de contar siempre la verdad. Tras casi nueve meses dándonos plantón, el Bruce Willis hispano sin la voz de Ramón Langa, vuelve a compartir mesa y mantel con los telespectadores de Telecinco. Se especuló mucho en Internet sobre las causas reales de su ausencia. Incluso algunos ya estaban ultimando hasta las exequias de su guiñol. Por eso, cuando he reconocido su voz en la imagen de la enésima desgracia de la semana, y eso que la acabamos de empezar, lo he celebrado alzando mi vaso de agua mientras comía un infumable rancho de macarrones.
Una persona que estaba enferma se ha recuperado, y eso siempre es una buena noticia. Hartos de que permanentemente los periodistas, por tierra, mar y aire, o sea, prensa, radio y televisión, nos crucifiquen con noticias desgraciadas, hoy uno de ellos ha sido, paradójicamente, el protagonista de la buena noticia del día. Por ello también quiero celebrar una iniciativa que ha tenido mi tocayo Sánchez Dragó, consistente en incluir una sección dedicada sólo a sucesos alegres en su Diario de la noche. Se llama el Rincón de las buenas noticias, presentado por el fascinante y de lectura imprescindible Alejandro Jodorowsky.
La vida es algo maravilloso, pero depende también de ti que así sea. Es una sacrilegio pensar que el mundo es un desastre. Piensa que si a pesar de toda la maldad el planeta sigue en pie, es porque hay muchísima más gente buena que mala, de eso no tengas la menor duda, lo que pasa es que los segundos hacen más ruido. Siempre nos vamos a cruzar con hijos de puta, posiblemente hoy te hayas cruzado con alguno de ellos, pero también hay mucha gente anónima que hace que el milagro de la vida merezca la pena. Por ponerte un ejemplo, ese personal sanitario que anoche vi en televisión, y que diariamente cuida de los niños ingresados en la UCI del Hospital infantil Niño Jesús, en Madrid. Allí tienen un tablón de la esperanza, donde cuelgan las fotos de todos los niños que lograron salir del hospital tras superar su enfermedad y hoy llevan una vida normal. Estos profesionales de salvar pequeñas vidas no salen habitualmente por televisión, pero son responsables de que este planeta sea mucho mejor de lo que nos han hecho creer desde que nacimos en ése u otro hospital cualquiera.
Por eso hoy, contraviniendo la máxima de que una buena noticia no es noticia, quiero brindar por los trabajadores del Hospital Niño Jesús y de todos los hospitales, infantiles o no, y también por Hilario, por los Beatles, por las putas tristes y las alegres, por Woody Allen, por el Orfeón Donostiarra, por Beethoven, por los habitantes de Springfield, por los amantes antiguos y los que están por conocerse, por los atardeceres rojos mediterráneos, por los locos bajitos para que nunca acaben de crecer, y por todo lo que bueno que tú conoces y disfrutas. Y también por ti, héroe anónimo que puedes cada día, si lo tienes a bien, gozar de la belleza que, pese a quien pese, jamás dejará de presidir este mundo y de la que tú también eres creador. Desde esta página te deseo que, como Hilario, jamás pierdas las ganas ni la ilusión, ni olvides la mayor verdad que jamás será portada: la vida, a pesar de todo, es maravillosa.
5 COMENTARIOS:
Con la frase final me recuerdas a Andrés Montes. Gracias por un mensaje tan positivo y lleno de vitalidad y alegría de vivir. Hacen falta algunos de estos en medio de este despropósito que es el planeta Tierra. TANA
Una voz agradable y rotunda facilita mucho la comunicación en los medios informativos. Eso también es extrapolable a cualquier otro ámbito de la vida; un buen comunicador es una joya que no debe desperdiciarse. Mi enhorabuena a Hilario Pino por la recuperación de su dolencia. Profesor Sibelius
Suena todo muy bonito, pero yo solo encuentro hijoputas por ahí. Debe ser que pululan mas por todas partes ... Pirulo15
Gracias a todos por vuestras respuestas.
Pirulo15: Es cierto que en la vida te cruzas con muchos hijoputas, de hecho sucede a diario, a mí qué me vas a contar. Lo que sucede es que uno tiene que intentar alejarse de esa clase de gente, y no dedicarles ninguna atención, porque cuanto más pensemos y hablemos de ellos, más nos perjudican.
Siempre hay gente buena por ahi, a pesar del mal rollo que tienen algunos. Gracias a eso la vida continua, que no es poco. A esos es a los que hay que dar muchas veces las graacias.
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